En la actualidad, la presencia en línea es vital para las empresas. Un plan de marketing digital contiene en un solo documento todas las estrategias relacionadas con la generación de demanda.
Esto significa que si tu empresa vende osos de peluche personalizados a través de un sitio de comercio electrónico, este describirá todas aquellas tácticas y acciones dirigidas a mejorar la demanda de tu oferta.
¿Qué es un Plan de Marketing Digital?
Un plan de Marketing Digital consiste en un documento donde se recogen todos los objetivos y la planificación de estrategias y acciones de Marketing a desarrollar con el objetivo de que todo lo que se plantee en el documento tenga una justificación y se puedan conseguir los objetivos marcados.
El plan de Marketing Digital es un informe muy elaborado en el que especificamos los objetivos a lograr, así como las estrategias y tácticas que emplearemos para alcanzarlos. La capacidad para elaborar Planes de Marketing Digital acertados puede ser un punto diferencial en un profesional de este sector.
Beneficios de un Plan de Marketing Digital
Un plan de marketing (digital, offline o mixto) es un documento interno de carácter no obligatorio en el que se recogen los objetivos del siguiente periodo, se estudia la posición de la empresa respecto a la competencia, se establece una línea de acción, y que también sirve para comprobar los objetivos al final del periodo.
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El beneficio principal del plan de marketing es poder marcar un camino que seguir a corto plazo, con un objetivo a largo y algunas metas intermedias.
Aquí hay algunos beneficios clave:
- Orientación estratégica: Proporciona una dirección clara para las actividades de marketing en línea.
- Uso optimizado de recursos: Al planificar de antemano, se pueden destinar recursos de manera eficiente, desde la asignación de presupuestos hasta la selección de canales de marketing adecuados y la programación de campañas de marketing.
- Medición y seguimiento: También incluye indicadores clave de rendimiento (KPI) que permiten evaluar el éxito de las estrategias.
Además, toma en cuenta que este debe estar alineado con los objetivos empresariales de tu compañía. Por ejemplo, si una compañía tiene proyectado mejorar sus ventas, el plan tendrá que ir en la misma dirección.
“Un plan de marketing digital no es solo un documento, es el mapa que guía tu negocio en un océano de oportunidades y desafíos.
Pasos para Desarrollar un Plan de Marketing Digital
A la hora de desarrollar un plan de Marketing Online, hay que tener en cuenta una serie de puntos clave. Antes de empezar un plan de Marketing Digital, es de vital importancia entablar una primera toma de contacto con el cliente para detallar y concretar cuáles son los objetivos.
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Aunque hay muchas aproximaciones a un plan de marketing digital, la más común sigue la ruta que detallamos a continuación.
1. Análisis de la Situación
El primer concepto a incluir en un plan de Marketing Online tiene que ser el estudio de la situación actual o análisis del entorno.
Por eso estudiaremos el entorno realizando un análisis, tanto interno como externo, sobre el sector en el que operamos y en el que se enmarca el producto o servicio en cuestión, siempre dejando claro factores demográficos, económicos, tecnológicos, políticos o socioculturales, los cuales son de vital importancia.
Al crear un plan de marketing digital, es crucial ser consciente de ciertos errores comunes que pueden afectar su eficacia. Otro error es establecer objetivos vagos; es fundamental que tus metas sean específicas y medibles. Además, subestimar la importancia del análisis de datos puede llevar a decisiones mal informadas.
En este punto hay que prestarle especial atención a la investigación para tener presente las herramientas que se han utilizado para mantener su presencia online, así como qué estrategia y tácticas han seguido en el pasado.
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Una vez conocemos lo que quiere el cliente, la información de la marca y tenemos claro cómo es nuestro público objetivo, toca empezar a realizar la investigación al detalle de la presencia online, tanto de la marca como de la competencia.
Para ello, es muy recomendable el uso de herramientas tanto gratuitas como de pago para detectar el estado de la marca y el de las empresas competidoras. Herramientas como SEMrush, Sistrix, Moz, aHrefs o las propias redes sociales pueden ayudar mucho a identificar el estado de la presencia online, ofreciendo datos que facilitan mucho la investigación, ya que nos ahorran hacer muchas cosas manualmente.
Datos analíticos como visitas diarias y mensuales, tráfico directo, orgánico y de pago, tasa de rebote, páginas indexadas, número de backlinks, número de fans y followers, nivel de engagement, etc.
Si queremos crecer y mejorar, lo primero que tenemos que hacer es conocernos bien a nosotros mismos. Si tenemos la panorámica completa de nuestro negocio, podremos tomar decisiones sobre puntos calientes positivos y negativos, estando seguros de que nada queda olvidado ni ningún factor es tenido en cuenta.
Una visión objetiva y detallada de lo que está sucediendo en nuestra empresa es algo básico para poder plantearnos objetivos realistas. Un análisis interno de la empresa conlleva analizar muchas cosas distintas y, por tanto, hay muchas formas de hacerlo. Una de las opciones más populares es el análisis DAFO en el que detallamos todas las debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades a las que se enfrenta nuestro negocio.
En este sentido, el estudio de las cinco fuerzas de Porter ayuda a entender nuestro papel en la cadena de valor y compararnos con la competencia. Este análisis nos hace revisar elementos como: los clientes que tenemos, los proveedores, los productos sustitutos, los nuevos competidores potenciales y la competencia.
Gracias al análisis de las amenazas de estas fuerzas competitivas, podemos determinar nuestra posición en el mercado y entender por qué tenemos la cuota de mercado actual.
Tenemos ya claro cómo funcionamos y cómo funcionan los demás, ahora es el turno de ver a quién le puede interesar nuestro producto objetivo y conocerlo profundamente.
Para ver qué necesidades podemos satisfacer en el mercado, hay que conocer al público: saber qué quiere obtener, qué necesita, qué no le aportan nuestros competidores, cada cuánto compra. Para realizar esto, uno de los mejores métodos es construir un buyer persona, que no es más que realizar fichas en las que recogemos toda la información relevante de los distintos tipos de cliente que tiene nuestra empresa.
2. Definición de los Objetivos
Una vez tengamos toda la investigación realizada y se conoce la situación de la que partimos, llega el momento de empezar a diseñar el plan de marketing digital.
Tan importante como conocernos y entender nuestra posición es saber hacia dónde vamos. Los objetivos son una herramienta de prospectiva y futurología que ayudan a comprender dónde se espera estar en una década, un año o un mes. Cuanto más próximos estos eventos, más específicos han de ser los objetivos. Lo relevante es plasmarlos de forma concisa.
Los objetivos de negocio son puramente económicos, medibles a corto plazo. Aquellos que, como su nombre indica, son sinónimo de viabilidad del negocio dependiendo de si se cumplen o no. Los objetivos de marketing son aquellos que hacen que se cumplan los objetivos de negocio.
(M) Medibles: es fundamental que los objetivos se puedan cuantificar o cualificar de alguna manera, para así comparar el resultado.
3. Definir la Estrategia y las Tácticas
La estrategia la forman un conjunto de acciones aplicadas cuyo fin es desarrollar los objetivos marcados. Las tácticas, son posiblemente las que más trabajo conlleva, tiene que ver con la forma y el método de realizar las tareas.
Uno de los elementos más importantes dentro del plan de marketing digital de tu empresa es establecer y contar quién eres como compañía: qué buscas, cuáles son tus valores, qué ofreces (más allá de un producto o servicio) a tus clientes.
Por otro lado, el posicionamiento de marca es una estrategia que promueve una idea o una imagen de una empresa en el imaginario del público.
Estrategias, tácticas, operaciones… Las metas intermedias de los objetivos marcan el paso por aquellas ‘huellas’ que es necesario pisar para lograr los objetivos. Diseñar estrategias y tácticas de marketing es crear un plan de acción desarrollado para promover y vender tus productos o servicios a través de los canales y mensajes relevantes para tu público objetivo.
Las estrategias de marketing pueden estar orientadas a muchas cosas distintas, no tienes por qué hacerlas tan grandes que abarquen todo el proceso de compra: puedes crear pequeñas tácticas que vayan influyendo en departamentos por separado, por ejemplo. Algunas ideas pueden ser: estrategias de lanzamiento de nuevos productos, de fidelización o de segmentación de tu público.
Mientras que los objetivos pueden ser algo más ambiguos, las estrategias suelen ser más extensas y detalladas. Para que el SEO funcione, el contenido de tu web y tu blog debe ser bueno. ¿Y para qué sirve este tipo de estrategia? Pues para crear una voz de marca (autoridad), es decir, para reflejar que eres experto en cierto ámbito y que tanto el público como Google (esto es lo que hace que luego salgas más arriba en buscadores) confíen en tu marca.
Hoy en día, una marca que no está en redes sociales, parece que no existe: te quedas fuera de la conversación y te pierdes a gran parte del público consumidor. Así que sí, debes estar ahí y participar. Eso sí, no tienes por qué estar en todas las redes sociales: reflexiona sobre tu producto o servicio y vuelve al buyer persona: ¿qué red social usa?
Las redes sociales son útiles y sirven para hacerte crecer si las usas correctamente: crea un calendario de publicaciones que te guíe y que respetes siempre, pero, por favor, sé flexible y adáptate al momento para romperlo si hace falta. Si hay un trend viral que encaja con tu marca, úsalo y métete en la conversación.
La clave está en combinar bien las publicaciones que son de carácter publicitario, con las que hablan de ti como marca, con las que, simplemente, siguen el día a día de la red social y se suben a la conversación del momento.
Muchas veces las empresas se centran en captar nuevos clientes con grandes ofertas y parece que no tienen nada que ofrecer a los que ya han comprado.
4. El Presupuesto
La elaboración y presentación del presupuesto es una de las acciones más determinantes a la hora de hacer el plan de marketing digital, ya que de él depende gran proporción del proyecto que se presenta. En el presupuesto es fundamental que se expliquen todos los detalles, desglosados y justificando cada acción que se llevará a cabo.
5. Implementación del Plan
Cuando todos los elementos anteriores se aprueben, será tiempo de implementar el plan. Para ello, tienes que haber asignado las campañas y las acciones a los miembros de tu equipo. Contar con las herramientas adecuadas puede marcar la diferencia en la efectividad de tus campañas es vital en marketing digital.
El plan de implementación no es otra cosa que un documento compartido en el que todo el equipo ve en qué punto estamos de la estrategia y cuáles son los siguientes pasos a dar para abordar la siguiente fase. En cuanto al calendario de acciones es una planificación en la que recogemos todo aquello que se sale del always on (las tareas que hacemos en el día a día en las distintas plataformas): por ejemplo, si vamos a hacer un envío de ofertas a través de la newsletter o si tenemos una colaboración en redes sociales con un creador de contenido.
6. Medición y Seguimiento
Ya tenemos en marcha buena parte de nuestro plan de marketing, pero ¿cómo vamos a saber si está funcionando? ¿O cómo de bien o mal nos está yendo? Es fundamental que en el plan de marketing digital tengamos un apartado en el que establezcamos KPIs (key performance indicator - indicador clave de rendimiento), que no son más que pequeñas ‘metas’ que vamos marcando dentro del objetivo global que queremos conseguir.
Todo esto lo analizamos a través de un plan de seguimiento, como puede ser un informe mensual, en el que recojamos la evolución de los KPIs respecto al objetivo final, lo cual nos sirve para estar siempre al día de lo que está ocurriendo en nuestro negocio.
Es importante tener en cuenta que fijar objetivos demasiado ambiciosos o sin metas intermedias es tan poco útil como redactar objetivos coherentes, pero no revisar qué puede ser mejorado en caso de no alcanzarse. A raíz de este análisis continuo los objetivos pueden cambiar con rapidez, y más aún las metas.
La revisión y actualización de tu plan de marketing digital es crucial para mantener su relevancia y efectividad. Durante estas revisiones, analiza el rendimiento de las métricas establecidas, evalúa la efectividad de las estrategias implementadas y realiza ajustes según sea necesario.
7. Asignación de Presupuesto
La asignación de un presupuesto para marketing es extraordinariamente compleja debido a la dificultad que se tiene para registrar los retornos en detalle. Ocurre algo similar al invertir en innovación o en personal.
Herramientas Útiles para el Marketing Digital
- HubSpot Marketing Hub: Una plataforma integral que ofrece herramientas para automatizar marketing, gestionar leads y crear contenido de calidad.
- Google Analytics: Una de las herramientas más populares para el análisis web.
Conclusión
En definitiva, elaborar un plan de marketing digital es una pieza clave a la hora de trazar una estrategia a largo plazo por parte de cualquier empresa, grande o pequeña.