Emprender un negocio es un reto apasionante, pero también exige preparación, organización y un conocimiento claro de los pasos que hay que seguir. En especial, te recomendamos acudir al “Punto de Atención al Emprendedor - Ventanilla Única Empresarial” de tu Cámara de Comercio donde especialistas en orientación y tramitación te lo pondrán todo mucho más fácil.
Identificación de la Oportunidad de Negocio
La primera pregunta que cualquier emprendedor debe hacerse es si su idea de negocio responde a una necesidad real. El punto de partida es detectar un problema o una carencia en los consumidores. Una idea puede ser innovadora, pero si no resuelve una necesidad, tendrá difícil encaje en el mercado.
Una buena práctica para testear el servicio o producto es la realización de focus group, donde se recoge la opinión sobre aspectos clave (utilidad, características, precio, etc.). Una vez identificada la posible oportunidad, conviene realizar un análisis más profundo.
¿Quiénes serán los clientes? ¿Qué hacen los competidores? ¿Existen tendencias que puedan reforzar o debilitar el proyecto? Es importante conocer cuál es el prototipo de cliente al que va dirigido el emprendimiento. Un error habitual es pensar que los potenciales clientes son todas las personas.
Análisis de la Competencia y el Mercado
Estudiar a la competencia es un máster avanzado en el mercado al que se quiere entrar. Observar qué cosas les funcionan y cuáles no ayuda a evitar errores y a conseguir mayores éxitos.
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Un análisis DAFO (debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades) puede ayudar a sintetizar la situación y orientar la estrategia desde el inicio. Un error habitual es realizar este análisis y dejarlo escrito en negro sobre blanco sin hacer nada con él.
Propuesta de Valor y Diferenciación
Definir cómo se va a presentar la oferta al mercado es clave. Toda empresa debe tener clara su propuesta de valor, es decir, qué ofrece que la hace única frente a la competencia. Puede ser el precio, la calidad, la experiencia de compra o un servicio posventa destacado. La diferenciación ayuda a que el negocio no dependa solo de competir en costes. Especialmente en un negocio nuevo, cuando lo más probable es que el producto o servicio sea más caro que la competencia al no disponer de trayectoria en el mercado y no poder acceder a rappels de los proveedores, a economías de escala, etc.
Antes de invertir grandes cantidades de tiempo y dinero, conviene validar la propuesta con clientes reales. Los canales a utilizar dependerán del público objetivo: redes sociales, campañas digitales, medios tradicionales o acciones en el punto de venta. El lenguaje que se va a utilizar es clave. Si se ha hecho una buena segmentación del mercado al que se va a dirigir la campaña (sexo, edad, estilo de vida, lugar de residencia…), se podrá adaptar el mensaje para hablar en el “mismo idioma”. No es lo mismo tener un público de la generación alfa que uno de la generación boomer. Tampoco es igual dirigirse a padres o madres que a los adolescentes. De la misma forma que el estilo de vida también marca el lenguaje.
El Plan de Negocio: La Guía del Proyecto
El plan de negocio es el documento que guía el proyecto. Es importante que este documento no sea un relato de lo que es el emprendimiento, sino que especifique los beneficios que obtendrán los inversores si depositan su confianza y recursos, y también con la solidez suficiente para poder defenderlo a la hora de solicitar financiación.
Todo proyecto requiere una inversión inicial. Conviene detallar tanto los costes fijos (alquiler, suministros, personal) como los variables (materias primas, comisiones, transporte). En el caso de una tienda física, habrá que incluir gastos de adecuación del local, mobiliario o stock inicial.
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Un emprendedor puede elaborar tres escenarios: optimista, realista y pesimista, lo que le permitirá evaluar mejor los riesgos y necesidades de liquidez. El objetivo inicial es alcanzar el punto de equilibrio, es decir, el nivel de ingresos que cubre los costes del negocio.
Forma Jurídica y Financiación
Elección de la forma jurídica: autónomo vs. La elección dependerá del tamaño del proyecto, el número de socios y las responsabilidades que se quieran asumir. ¿Qué es una startup?
Uno de los principales retos para cualquier emprendedor es conseguir la financiación necesaria para poner en marcha la idea. Antes de buscar financiación, es fundamental determinar cuánto dinero necesita el proyecto.
Los préstamos, pólizas de crédito o leasing permiten obtener capital para arrancar el negocio. Cada uno de estos vehículos de financiación tiene diferentes objetivos y varía en sus condiciones y tiempo de devolución. El préstamo puede ser para la compra de un local o marca comercial. Puedes consultar estas opciones en distintas entidades.
Diversas administraciones ofrecen programas de apoyo a nuevos emprendedores, tanto a nivel nacional como autonómico o local.
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Apoyo y Recursos Adicionales
Además de esta guía para emprender un negocio que puedes consultar siempre que lo necesites, la formación específica y la asesoría de especialistas, entre otros recursos, te pueden ayudar a darle forma a tu idea. En el terreno de la formación, puedes elegir entre infinidad de opciones, online o presenciales, que te servirán para conseguir y mejorar ciertas habilidades. Un primer paso puede ser empezar por cursos genéricos, como este sobre cómo crear y lanzar una empresa de Santander X, gratuito y abierto a emprendedores.
Trámites y Asesoramiento
Al acercarse el momento de poner en marcha tu negocio:
- Debes despejar las dudas sobre la forma jurídica más conveniente, las futuras obligaciones que te tocará cumplir como empresario o empresaria (fiscales, de seguridad social, laborales, contables o de otro tipo).
- Conocer el proceso de tramitación necesario, de acuerdo a que te constituyas como una sociedad mercantil o que vayas a desarrollar tu actividad como empresario o empresaria individual o autónomo/a.
- Y cuando estés en disposición de iniciar la actividad podrás elegir una de las soluciones de tramitación integrada para que la burocracia no sea obstáculo alguno.
Y si lo que necesitas es modificar algún aspecto de tu negocio (desarrollando o cambiando de actividades; cambiando la sede, modificando la fiscalidad, incorporando nuevos socios, etc.), igualmente te recomendamos acudir al “Punto de Atención al Emprendedor - Ventanilla Única Empresarial” de tu Cámara de Comercio donde te asesorarán y te ayudarán a efectuar los trámites necesarios.
El compromiso de las Cámaras de Comercio con las personas emprendedoras y la creación de empresas, hace que colaboremos activamente en todos los pasos necesarios para abrir tu negocio. Para que crear una empresa o reorientar tu negocio no sea una carrera de obstáculos, te facilitamos esta atención integral en un único punto de atención.