En el dinámico mundo empresarial actual, el cumplimiento normativo se ha convertido en una prioridad ineludible. Las empresas, sin importar su tamaño o sector, deben navegar por un laberinto de leyes y regulaciones en constante evolución. Aquí es donde un centro de consultoría normativa juega un papel crucial, ofreciendo la experiencia y el apoyo necesarios para garantizar que las organizaciones operen dentro de los límites legales y éticos.
¿Qué es un consultor jurídico?
Un consultor jurídico es un profesional del derecho que recomienda a una empresa o autónomo sobre la mejor forma de proceder respecto a una situación legal. La gran cantidad de normativa aplicable y su continua actualización hace que sea necesario recurrir a estos profesionales en múltiples ocasiones. Además, los consultores jurídicos están especializados en las diferentes ramas del derecho (mercantil, civil, tributaria, etc.) y son expertos en su campo.
En ocasiones, los consultores jurídicos, tras analizar una situación concreta pueden realizar un informe o dictamen que remiten a los responsables de la empresa. Para este tipo de situaciones, la empresa puede recurrir, como explica la propia normativa, al “apoyo y asesoramiento externo especializado en materia de igualdad entre mujeres y hombres en el ámbito laboral”. Es decir, puede optar a que un consultor jurídico externo le aconseje cómo realizar este informe, su redacción y los pasos a seguir a la hora de mejorar en este ámbito concreto.
Los servicios de consultoría legal pueden estar especializados en consultoría empresarial, financiera, tributaria, laboral, judicial e, incluso, -después de la entrada en vigor en 2015 de la responsabilidad penal corporativa- en materia penal.
En función de todo lo anterior, los principales servicios que presta un consultor jurídico serían:
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- La asistencia legal especializada según su campo.
- La elaboración y redacción de informes o dictámenes.
- La recomendación de actuación.
- La representación letrada en caso de ser necesario.
- Elaboración de documentos jurídicos.
Con el paso del tiempo, para muchas empresas se vuelve muy complejo seguir la normativa aplicable en cada caso y los cambios que van introduciéndose. Por ese motivo, el puesto de consultor jurídico es una de las salidas más interesantes laboralmente para los expertos en cuestiones legales.
Para ser consultor jurídico, en primer lugar, es necesario disponer del Grado en Derecho, una carrera con grandes salidas profesionales en distintos ámbitos y con grados de especialización de todo tipo.
Posteriormente, existen estudios de posgrado especializados como el Máster en Asesoría Jurídica de Empresas online de UNIR, que preparan con información práctica y teórica a los profesionales que busquen dedicarse a la asesoría o consultoría de empresas.
Diferencia entre consultor y asesor jurídico
Aunque en muchas ocasiones se utilizan como sinónimos, lo cierto es que existen muchos tipos de asesoría relacionada con el derecho y muchos tipos de expertos que no realizan en todo momento las mismas funciones (aunque algunas sí se solapan).
El asesor jurídico es un servicio externo de asistencia legal que, como un consultor, también está especializado en un campo concreto del derecho y también recomienda actuaciones y ayuda a las empresas a adaptarse a la normativa. A priori puede parecer un puesto similar, sin embargo, la gran diferencia entre un asesor jurídico y un consultor jurídico es el tiempo. El asesor jurídico realiza sus funciones de forma sostenida y periódica, mientras que un consultor jurídico es un servicio al que se recurre de forma puntual y para resolver o analizar una situación concreta.
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Madrid: Un Entorno Óptimo para la Consultoría Normativa
Madrid no solo es el centro político y económico de España, sino también un mercado fértil para el desarrollo de servicios profesionales altamente especializados. En este contexto, crece el interés por modelos de negocio que ofrezcan rentabilidad, baja inversión inicial y una demanda empresarial constante. Uno de los más destacados en 2025 es el de la consultoría normativa, especialmente en áreas como la protección de datos, el compliance penal o los canales de denuncias.
Madrid concentra más de 500.000 empresas registradas, incluyendo pymes, grandes corporaciones, centros educativos, organismos públicos y startups tecnológicas. Este tejido empresarial se enfrenta a retos normativos comunes:
- Cumplimiento del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD).
- Obligación de implantar canales éticos de denuncia (Ley 2/2023).
- Necesidad de contar con sistemas de compliance penal y corporativo.
- Gestión segura y legal de datos en entornos digitales.
Todo ello convierte a la capital en un mercado en expansión para consultores especializados, y en un escenario ideal para desarrollar un modelo profesional basado en la prestación de estos servicios.
Ventajas de la Consultoría Normativa
A diferencia de otros sectores más tradicionales o dependientes del consumo físico, el cumplimiento normativo:
- Responde a una necesidad legal obligatoria, no a una moda.
- Afecta a todas las empresas, sin importar el tamaño o el sector.
- Permite trabajar con estructuras ligeras, sin local ni stock.
- Ofrece ingresos recurrentes, gracias a los servicios de mantenimiento normativo.
- Tiene alta percepción de valor por parte del cliente.
Estas ventajas se amplifican en un entorno como Madrid, donde hay una mayor sensibilidad regulatoria, más competencia profesional entre empresas y un ecosistema jurídico-administrativo más activo.
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Franquicias de Servicios Legales en Consultoría Normativa
La franquicia de servicios legales permite iniciar una actividad profesional en Madrid con formación, soporte y herramientas. Incluye:
- Formación técnica y comercial inicial y continua.
- Uso de marca, metodología y documentación validada.
- Acceso a plantillas legales, herramientas digitales y protocolos operativos.
- Soporte jurídico en tiempo real.
- Acompañamiento comercial y estrategia de captación en el territorio.
Todo ello con una inversión inicial entre 10.000 y 20.000 euros, sin necesidad de local ni personal, lo que permite una rápida puesta en marcha con alta rentabilidad.
Servicios Ofrecidos como Franquiciado
Desde el inicio, puedes prestar a empresas, colegios, clínicas, ayuntamientos o asociaciones de Madrid servicios como:
- Implantación del RGPD y adaptación al marco legal nacional.
- Diseño e implantación de canales de denuncia obligatorios.
- Desarrollo de programas de compliance penal y códigos éticos.
- Auditorías normativas y formación legal al personal.
- Mantenimiento documental y revisión continua de cumplimiento.
Estos servicios no son puntuales: exigen revisiones, actualizaciones y formación continua, lo que genera una base de clientes fidelizada.
Perfil del Franquiciado Ideal
La oportunidad está abierta a profesionales con o sin experiencia jurídica. Se valora especialmente:
- Capacidad comercial y de asesoramiento.
- Experiencia en consultoría, formación o prevención de riesgos.
- Motivación para emprender con respaldo.
- Interés en el ámbito normativo y legal.
No es necesario ser abogado.