El mundo empresarial es un escenario en constante cambio y evolución. Las organizaciones que se mantienen exitosas en el tiempo son aquellas que logran adaptarse a estos cambios, a la vez que mantienen su esencia y su propósito intactos. La herramienta que les permite hacer esto es el liderazgo basado en valores.
¿Qué es el Liderazgo Basado en Valores?
Comencemos definiendo lo que es el liderazgo basado en valores. El liderazgo basado en valores no es solo una estrategia empresarial, es una filosofía de vida que se aplica a todos los aspectos de la organización.
En este marco, los líderes no solo se enfocan en cumplir metas y alcanzar resultados, sino que buscan hacerlo de una manera que esté alineada con sus valores. Por otro lado, el liderazgo basado en valores también implica el compromiso de los líderes de promover y cultivar esos valores en todos los niveles de la organización.
La Importancia de los Valores en el Liderazgo
Entender la importancia de los valores en el liderazgo es crucial para comprender la relevancia del liderazgo basado en valores. Todo coach sabe que los valores son el núcleo de nuestros pensamientos y acciones.
Por eso, tienen una metodología específica para trabajar los valores de las personas y de las organizaciones. Esta metodología implica primero identificar los valores que son importantes para la persona o la organización.
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Además, el coach ayuda a las personas y a las organizaciones a reconocer los momentos en los que sus acciones pueden no estar alineadas con sus valores y a explorar las razones detrás de estas incongruencias. Por último, el coach también ayuda a las organizaciones a integrar sus valores en sus estrategias de liderazgo y gestión.
Los valores juegan un papel fundamental en el crecimiento ejecutivo. Los valores actúan como un marco de referencia que guía a los líderes en la toma de decisiones.
Implementación del Liderazgo Basado en Valores
El primer paso para implementar un liderazgo basado en valores es identificar y definir los valores de la organización. Una vez identificados los valores, es importante definirlos de manera clara y concisa. Una vez definidos los valores, es esencial comunicarlos de manera efectiva.
Beneficios del Liderazgo Basado en Valores
El liderazgo basado en valores no solo beneficia a los líderes, sino a toda la organización. En primer lugar, los valores ayudan a crear una cultura organizacional fuerte y coherente. En segundo lugar, al estar fundada en valores, la organización proyecta una imagen de confianza y credibilidad hacia sus stakeholders. Finalmente, un liderazgo basado en valores promueve un ambiente de trabajo positivo y saludable.
Fomentando una Cultura Organizacional Basada en Valores
Fomentar una cultura organizacional basada en valores no es tarea fácil. Requiere un compromiso firme y constante de todos los miembros de la organización, empezando por los líderes. Los líderes deben ser los primeros en vivir y promover los valores. Además, los valores deben estar integrados en todas las políticas, procesos y prácticas de la organización.
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No es suficiente tener un listado de valores en la pared o en la página web. Por último, es importante que la organización tenga espacios y momentos para reflexionar sobre los valores y para celebrar y reconocer a aquellos que los viven de manera ejemplar.
Stephen Covey y el Liderazgo Centrado en Principios
‘Primero, lo primero’ o ‘Liderazgo centrado en principios’ son solo dos de los libros que componen la bibliografía de Stephen Covey; aunque a muchos les sonará más por el título ‘Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva’, muy de moda hace unos años. Bueno, pues Stephen Covey es uno de los denominados ‘gurús de los buenos hábitos’ porque toda su vida la pasó desarrollando el concepto gestión empresarial y liderazgo.
Stephen lo tenía muy claro: “Tus actos siempre hablan más alto y más claro que tus palabras”; y es cierto: un líder debe predicar con el ejemplo. Cuando hablamos de empresas responsables, lo que irradian en la sociedad es una imagen de organizaciones concienciadas sobre la importancia de impactar positivamente en el entorno y en las personas de su alrededor.
Yo quiero ir más allá: una empresa no es solo una compañía, no es un ente por sí mismo; una empresa responsable es un conjunto de personas capitaneadas por un líder que tiene la imagen global del negocio y del entorno, y entiende que cómo desarrolle su actividad debe atender a unos valores y a una causa noble.
Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva y su Relevancia
El libro “Los 7 hábitos de la gente altamente efectiva” presenta un enfoque holístico para el éxito personal y profesional. Covey propone siete hábitos que, cuando se internalizan y se ponen en práctica, pueden llevar a una vida más equilibrada y productiva. Estos hábitos son:
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- Ser proactivo: Tomar la iniciativa y responsabilidad de nuestras acciones.
- Comenzar con un fin en mente: Definir claramente nuestros objetivos y metas.
- Poner primero lo primero: Priorizar tareas y actividades basadas en su importancia, no en su urgencia.
- Pensar en ganar/ganar: Buscar soluciones que beneficien a todas las partes involucradas.
- Buscar primero entender, luego ser entendido: Escuchar activamente antes de expresar nuestra perspectiva.
- Sinergizar: Trabajar colaborativamente para lograr objetivos comunes.
- Afilar la sierra: Dedicar tiempo a renovar y mejorar nuestras capacidades físicas, mentales y espirituales.
Las ventas, como disciplina, requieren habilidades de comunicación, empatía, escucha activa y capacidad para influir en las decisiones de los demás. Los hábitos propuestos por Covey se alinean perfectamente con estas necesidades.
Por ejemplo, el hábito de “Pensar en ganar/ganar” promueve la idea de que una venta exitosa no es simplemente una transacción, sino una relación en la que ambas partes (vendedor y cliente) se benefician. Esta perspectiva ha llevado a una evolución en las técnicas de venta, donde se valora la construcción de relaciones a largo plazo por encima de las ventas a corto plazo.
Influencia en el Mundo Empresarial
El mundo empresarial, con su dinámica compleja y desafíos constantes, ha encontrado en los principios de Covey una guía para navegar con éxito. Empresas de todo el mundo han adoptado los 7 hábitos como parte de su cultura organizacional, capacitando a sus empleados en estos principios y alentándolos a incorporarlos en su vida diaria.
El enfoque de Covey sobre la proactividad, la visión a largo plazo y la colaboración ha llevado a las organizaciones a repensar sus estrategias y a enfocarse en el desarrollo personal y profesional de sus empleados. La idea de que las empresas prosperan cuando sus empleados prosperan ha ganado terreno, y los principios de Covey han sido fundamentales en este cambio de paradigma.
El Carácter y la Excelencia del Liderazgo
Tu carácter tiene que ver con tu integridad, con la coherencia que existe entre tus valores y tu comportamiento. Una persona de carácter es aquella que es fiel a sus valores y principios independientemente de las circunstancias. La relación del carácter y la excelencia del liderazgo ha sido abordada por diferentes autores, concluyendo que un gran liderazgo exige un gran carácter.
Stephen Covey, por ejemplo, en su obra “Liderazgo centrado en principios”, nos dice que hay dos elementos cruciales para el éxito de los líderes: la competencia y el carácter. El carácter es un rasgo subjetivo que parece que desafía a ser cuantificado.
Para medir el retorno del carácter, KRW lo filtró a través de cuatro principios morales: la integridad, la responsabilidad, el perdón y la compasión. El estudio ofrece una evidencia que demuestra la conexión entre el carácter, la excelencia del liderazgo y los resultados de la organización.
En un extremo del espectro están lo que denominan «CEOs virtuosos» (aquellos que recibieron altas calificaciones en los cuatro principios). El desarrollo de tu carácter, apreciado CEO, es un proceso continuo que dura toda la vida y que gira en torno a dos cosas importantes: tus hábitos y tus valores.
Vivir de acuerdo a un código superior tiene un efecto positivo sobre tu destino y, además, sobre los resultados de la compañía que lideras.
Ejemplos de Liderazgo Centrado en Valores
¿Qué significa ser un buen líder? En el entorno laboral actual, el liderazgo va mucho más allá de dirigir equipos o tomar decisiones estratégicas. Un buen líder es una persona honesta, íntegra, empática, capaz de inspirar, comunicar con claridad, generar confianza y compromiso y adaptarse a los desafíos con determinación.
Hoy más que nunca, buscamos referentes que no solo destaquen por su éxito profesional, sino por su capacidad de movilizar a las personas, impulsar el cambio y dejar huella.
Nelson Mandela: Liderazgo Basado en Valores
Nelson Mandela es un símbolo universal de integridad, perseverancia y justicia. Su liderazgo transformador, basado en la empatía, la resiliencia y la defensa incansable de los derechos humanos, lo convirtió en una figura respetada en todo el mundo. Sus frases siguen inspirando hoy: “Las apariencias importan, recuerda sonreír”.
Mandela nos recuerda que un líder auténtico es aquel que defiende sus principios incluso en las circunstancias más difíciles, conectando con las personas desde el respeto y la humanidad.
Indra Nooyi: Liderazgo Empático y con Propósito
Indra Nooyi, cuyo nombre completo es Indra Krishnamurthy Nooyi, fue presidenta y CEO de PepsiCo y revolucionó el liderazgo empresarial al apostar por un modelo más humano, sostenible e inclusivo. Fue una de las primeras mujeres inmigrantes en liderar una multinacional de esta magnitud, y durante su mandato las ventas crecieron un 80%.
Para Nooyi, el liderazgo no se basa en la autoridad, sino en la capacidad de conectar y cuidar del equipo: “El líder que intimida, perderá a su equipo”. Su estilo demuestra que la empatía y la visión a largo plazo pueden ser grandes motores de cambio.
Steve Jobs: Liderazgo Creativo y Exigente
Steve Jobs es un referente en el mundo de la tecnología y la innovación. Su estilo de liderazgo audaz, exigente y orientado a la excelencia impulsó la transformación de Apple y marcó una era.
Jobs confiaba en el potencial de su equipo para superarse continuamente. Una de sus frases más conocidas, “Chicos, podéis hacerlo mejor”, no era una crítica, sino una invitación al desafío y al crecimiento constante. Su legado nos muestra que el liderazgo también implica pasión, visión y la capacidad de desafiar lo establecido.
Amancio Ortega: Liderazgo Discreto y Estratégico
Amancio Ortega, fundador de Inditex, es conocido por su estilo de liderazgo discreto, basado en el trabajo constante, la capacidad de delegar y la inteligencia para rodearse del mejor talento. Su apuesta por el trabajo en equipo y la toma de decisiones compartidas fue clave para convertir a Zara en una marca global.
Un dato curioso: la primera tienda iba a llamarse Zorba, pero al estar registrado ese nombre, finalmente optaron por Zara, hoy sinónimo de éxito en el mundo textil.
Características Comunes de Estos Líderes
Podríamos seguir citando referentes sin terminar nunca. Cada líder inspira de forma diferente, con sus propios valores, personalidad y estilo de liderazgo. Pero todos tienen algo en común: la capacidad de guiar, motivar y transformar su entorno.
Para nosotros, un buen líder combina muchas cualidades: es íntegro, empático, honesto, inspira confianza, sabe trabajar en equipo y no teme asumir riesgos para alcanzar sus objetivos.