Spider-Woman: Un recorrido por la historia de un personaje en constante evolución

La primera Spider-Woman apareció en 1975 y se llamaba Valerie, parte de The Electric Company. Su paso a los cómics nos permitió cosas como esta imaginación de una Spider-Woman. No apareció mucho, eso sí, aunque la colección duró 57 números.

Dos años después, en el Marvel Spotlight #32, la visión de Stan Lee llegó demostrando su pensamiento privilegiado y su decisión de no callárselo.

LEE: Ni siquiera he leído esa maldita cosa. [Risas] Puede que lo haya dicho y no lo recuerdo, tal vez fue el disfraz o algo así.

ASKGREN: ¿Qué tipo de pensamiento entró en ese personaje?

LEE: Sí… ¿sabes por qué lo hicimos, de verdad? De repente me di cuenta de que alguna otra empresa podría publicar rápidamente un libro como ese y afirmar que tiene derecho a usar el nombre, y pensé que sería mejor hacerlo muy rápido para proteger el nombre. Así que eliminamos uno rápidamente y eso es exactamente lo que pasó. Quería proteger el nombre, porque es el tipo de cosas que alguien podría decir: «Oye, ¿por qué no sacamos una Mujer Araña? No pueden detenernos».

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LEE: Exacto, y eso me molesta bastante. De hecho, eso me recuerda que tengo que preguntarle a la abogada; se supone que va a iniciar una demanda por eso y no he oído nada. No me gusta la idea… Ya sabes, hace años sacamos a Wonder Man y nos demandaron porque tenían a Wonder Woman, y yo, siendo un caballero [Risas], dije está bien, descontinuaré Wonder Man. Y de repente tienen a Power Girl. Oh chico. Que injusto. Sí, recordaré comprobarlo.

Por obra de Archie Goodwin (en su doble papel de guionista y editor) y Sal Buscema -a partir de un diseño de Marie Severin- conocemos a… Arachne. Una joven con poderes a la que acusan de bruja en un pueblecito centroeuropeo y a la que el odio de sus conciudadanos lleva a unirse a una organización criminal. Total, que se va a hablar con su jefe y este le confiesa que sí, que efectivamente y que, de hecho, tiene un origen secreto. Tiene mucho mérito porque tardar 7 páginas en retconear un origen debe de ser algún récord incluso para Marvel.

¡EL ALTO EVOLUCIONADOR! Sí, y los Caballeros de Wundagore. El asunto es que Arachne le queda claro que, en realidad, es una araña con forma de mujer. La aventura acaba con ella habiendo ayudado a SHIELD a acabar con ese grupo de HYDRA, pero sin cruzarse con ellos. Dando vueltas perdida.

Pero estaba Marv Wolfman por medio, que estuvo convenciendo a Stan Lee de que le diera una oportunidad, que él tenía ideas. Eso le llevó a una aparición en Marvel Two in One que usó durante cinco números, y con Ron Wilson de dibujante, para una miniserie de lanzamiento encubierta que se centraba en lo que claramente necesitaba más. Que quede claro que no es una araña convertida en mujer sino… otra cosa… Pero definitivamente una mujer.

En la que se hacían algunos cambios claramente necesarios. Y no me refiero a poner a Carmine Infantino a dibujarla. No solo. Por ejemplo, en su origen. Sí, otra vez. Y ahí volvemos al momento del Spotlight. En fin, ¿qué podemos decir de todo esto? Además de que un científico que dice «Nunca pensé que el uranio afectaría a Jesse» está, claramente, cerca del Nobel. Ah, sí, porque ya tiene nombre: Jessica Drew.

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Por supuesto, y como hemos visto de antes, Stan Lee tenía opiniones sobre cosas que había que arreglar. Fundamentalmente el traje. ¿Y qué cambia en el traje? Efectivamente, el pelo. La forma de lograr que no la relacionen es, por supuesto, teñirse el pelo. De esa manera nadie pensará en la chica que… ahm… ahora tiene el pelo teñido también.

Por supuesto lo más interesante es cuando dice cosas como que no han cambiado nada de lo que Goodman escribió, solo añadido. Por ejemplo, Goodman escribió Es una araña convertida en mujer y él solo añade delante Es una chica que ha olvidado su pasado y cree que. Pequeñas cosas que nada alteran.

También explica que no va a tener historias ‘estrictamente‘ superheroicas como Spidey, no va a combatir monstruos como en el Marvel Two in One y, aunque en su texto no lo ponga, ya os digo yo que tampoco va a ser una de espías como en su primera aparición en el Spotlight. Ah, y también dedica un buen párrafo a explicar el nombre. Que es el de su hija.

En fin, un inicio que mostraba que Wolfman tenía ideas para el personaje. Muchas ideas. Lo cierto es que entre la aparición del misterioso Magnus y el ponerle un novio de SHIELD -con el que se niega a colaborar-, más hacer a sus antagonistas gente como los Brother Grimm, The Hangman o El Hombre Lobo parece que hay un cierto interés por lo macabro en la serie.

En el número 9 (1978) decide dejar la colección. Wolfman había sido guionista y editor de la colección hasta el número 8. A partir del 9 se repartirían el trabajo entre Mark Gruenwald -el guión- y Roger Stern -la edición-. Infantino aguantaría a los dibujos.

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La llegada de Gruenwald coincidía, además, con la aparición de la serie de animación -bueno, más o menos animación- del personaje aprovechando un acuerdo de Marvel. Sería la última serie de DePatie-Freleng Enterprises / Marvel Comics Animation, que ya habían colaborado con la ABC a finales de los sesenta.

En esos nueve primeros números la serie había pasado de ser una de las más vendidas a una más. Daba igual los esfuerzos de Wolfman o la decisión -suya y de Stan Lee- de mantenerla separa de Spidey. Parecía que eso no ayudaba a las ventas. Y eso llevó a la siguiente decisión.

Infantino se haría ido de la serie en el 19 y Gruenwald se quedaría solo hasta ese mismo número 20. A partir de ahí se haría cargo de la colección Michael Fleischer.

El número 20 presentaba al nuevo dibujante, Frank Springer, que duraría solo hasta el 22. A continuación Trevor von Eedon aguantaría dos números, hasta la entrada de Steve Leialoha en el 25.

Para entonces habría entrado también, por fin, un nuevo editor. Porque Roger Stern se marchó en el 19 y del 20 al 24 había estado ejerciendo Jim Shooter en un doble puesto como Editor en Jefe y Editor de la colección.

El problema más obvio es que para ese número 25, que debería haber servido para celebrar los poco más de dos años continuados de la serie, el recuento que se hacía era de tres guionistas, cuatro dibujantes y otros cuatro editores. Un carajal que demostraba lo que los lectores notaban: Nadie tenía muy claro qué hacer con el personaje.

Gruenwald no creó más que a una secundaria, Lindsay McCabe y, en realidad, solo apareció en tres números, dos de ellos hacia el final de su estancia. Cierto es que Gruenwald hizo cosas con otros cabos sueltos de la marcha de Wolfman, como la historia detrás de Brother Grimm. Quizá no muy bien anudados, pero algo era.

Le toca a Fleischer organizar las cosas, y primero lo intentó con un espantoso personaje masculino como novio. Con un intento de darle un policía ‘de apoyo’. Con el intento de usar más a McCabe. Y con un secundario que era también para verlo. Además de eso la convirtió en cazarrecompensas. El resultado fue… digamos que irregular en el mejor de los casos.

Para este 25 se había quitado -menos mal- de en medio al novio, también a McCabe, del policía se acordaba a ratos. Así que solo quedaba… el secundario. Scotty McDowell era un criminólogo en silla de ruedas que reunía la información y ayudaba a Jessica.

Las ideas de Fleischer habían sido… particulares. Incluida una historia con un asesino payaso. No, no un payaso asesino sino algo más cercano a… la realidad, digamos.

Fleischer entró en el número 21 y saldría en el 32. Tras un nuevo intento de que aquello funcionara, que incluía que el ayudante sufriera una transformación en el supervillano The Hornet.

De nuevo el final de la etapa coincidió con un intento de relanzamiento por parte de la editorial. Aparición en un Marvel Two in One junto a Hulk, escrito por Steve Grant y dibujado por… Infantino.

El número 33 fue de transición, con un guión de DeMatteis que entró aquí como podía haber ido en cualquier otro lado y en el que Spider-Woman pintaba poco o nada. Pero todo fuera por preparar al nuevo equipo para el número 34.

Esta vez desembarcaba un peso pesado de la compañía: Chris Claremont se encargaría de la serie. Claremont decidió que había que cambiar su ciudad de residencia, librarse del de la silla de ruedas en cuanto pudiera y convertirla en otra cosa.

Pero para que quedara claro que en realidad sí que se había leído los tebeos antiguos rescató a Lindsay McCabe como secundaria con, de nuevo, ningún interés por si tenía sentido o no lo que estaba haciendo.

El nuevo relanzamiento sirvió también para sacar al personaje en más sitios: Bubble Funnies Mini Comics que salían en los chicles o en cómics promocionales del 7 Eleven como Together for the First Time.

Pero, además de esto, empezaron a sacarla en sitios como Uncanny X-Men, que para eso tenía Claremont que intentar algo, también en un Anual de Vengadores, el 10, en el que su participación casual en un momento clave del Universo Marvel facilita que salga en flashbacks de cuando en cuando -vamos, que es la persona que evita que Ms. Marvel se hunda y muera en el río cuando Pícara cuando se dedica a robarle los poderes y tirarla desde el Golden Gate.

Así que decidieron dar otro volantazo más en el número 46 (Junio 1982). Se llevaron de nuevo a Mark Gruenwald. Pero esta vez de editor.

Lo que hizo fue quitarse de en medio a Claremont -que había estado junto un año, del 34 al 46- y a Leialoha -que estuvo del 25 al 46, superando por dos los 19 números que aguantó Infantino en el título-, y decidir que de perdidos al río, contando con dos jóvenes rupturistas: Ann Nocenti a los guiones y Brian Postman a los lápices.

En cuatro números no da para mucho, sobre todo si el editor quiere que los últimos hagan un repaso por el personaje y la gente con la que se ha encontrado. A ratos un tanto meta. En otras prácticamente Vértigo -un poco pronto, también es cierto-.

Lo cierto es que lo más sonado fue la decisión del número final.

Pero, además, decidieron irse por todo lo alto. La recuperación de personajes antiguos sirvió, por ejemplo, para que alguien se acordara de Magnus -probablemente Gruenwald, que es el que se lo había quitado de en medio y dejado como ‘ya veremos’- para finalmente contar su historia y pasado poniéndole junto a la protagonista en una batalla contra Morgana LeFey.

Por algún motivo ignoto esto sí que no gustó.

Vale que tras 50 números habían tenido a cinco guionistas, cinco editores y seis dibujantes.

Con la de problemas que eso da. Por ejemplo, que te pille este número 50 justo en medio de una aparición en Capitán América.

Así que Gruenwald, en cuanto tuvo la oportunidad, hizo para que se deshiciera esta situación. De manera literal.

Historial de Spider-Woman
Etapa Guionista Editor Dibujante
#1-8 Marv Wolfman Marv Wolfman Carmine Infantino
#9-19 Mark Gruenwald Roger Stern Carmine Infantino
#20 Mark Gruenwald Jim Shooter Frank Springer
#21-32 Michael Fleischer Jim Shooter Frank Springer/Trevor von Eedon/Steve Leialoha
#34-46 Chris Claremont Jim Shooter Steve Leialoha
#47-50 Ann Nocenti Mark Gruenwald Brian Postman

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